viernes, 17 de febrero de 2012

UNA GRAN CELEBRACIÓN: LOS 200 AÑOS DEL NACIMIENTO DE EL SERAFICO

Es todo un lujo poder recordar el espontaneo arte poético de Francisco José Ganga Ager, nacido en Elda, un 22 de febrero de 1812, siendo bautizado al día siguiente en la iglesia de Santa Ana. El Seráfico ha sido un gran poeta, debemos los eldenses hacer un esfuerzo por conocerlo un poco más, he de decir que, con motivo de este bicentenario, me he tomado la molestia de buscar uno de los libros publicados por Alberto Navarro, donde se recoge prácticamente toda su obra más reconocida, después de leer durante unos días, reflexiono y admito que ha sido un placer volver a leer sus decimas y cuartetas, unas llenas de humanidad, cariño y amor hacia sus paisanos y amigos, y otras de un sentido más filosófico y menos mundano, también alguna que otra con contenidos ciertamente procaces, pero bien traídas.



Su vida fue demasiado agitada, iba de aquí para allá, un día se acercaba a la vecina Monóvar, allí visitaba a familias amigas, en caso de estar alguno de ellos muy enfermo o recientemente fallecido, la familia le pedía que se arrancara y creara una cuarteta en honor del difunto y su familia. Otro día se trasladaba a Orihuela o a Murcia donde también tenía gente amiga y no tan amiga, “a uno que se llamaba Pascual, que se preciaba de ser superior la Seráfico por haber estudiado en el Colegio de Orihuela y de hacer versos como él, diciendo al Seráfico:

                                            Por supuesto, ya se ve
                                           ¿Quién de esto tiene duda?
                                           Solo una cabeza ruda
                                          Como la que tiene usted
Y el poeta le contestó:
                                        Pascual, aunque en Orihuela
                                        Estudiases de barato
                                       Tú serás siempre la suela
                                       Y El Seráfico el zapato



Poseía una habilidad especial para la creación poética, en cuanto alguien le daba pie, ya estaba pensando y rápidamente te recitaba un poema, la verdad es que leyendo esta obrita que os comento, se puede disfrutar de su ingenio y de la sociología del momento, de aquella época en pleno siglo XIX. Trabajó en diferentes y variados oficios, el más conocido es el de cofinero, un arte especial para trabajar el yute y fabricar artículos para el hogar y otras profesiones. También se dedicó a la albañilería y se conoce también sus trabajos en las obras del túnel, en aquellos años se iniciaron las obras del ferrocarril, la línea Madrid- Alicante. Uno de los impulsores de las obras del ferrocarril fue el marqués de Salamanca, personalidad muy influyente en la sociedad económica del momento, un importante hombre de negocios, con muy buenos amigos en los gobiernos liberales de Isabel II. Para termina, seguro que todos aquellos Eldense que me lean, conocerán los dos poemas que se encuentran a ambos lados de la fachada del cementerio municipal, seguro que a partir de ahora cada vez que visitemos a nuestros familiares y amigos o bien vayamos paseando por aquella parte de la ciudad, nos detendremos para recordar a nuestro insigne poeta Eldense, que hace algunos años en torno a unos amigos y un buen vaso de vino, de forma repentina recreaba un ambiente de melancolía y tristeza o por el contrario hacia esbozar una sonrisa o una carcajada a los contertulios allí presente. Estimados amigos y amigas disfrutar con la lectura de nuestro bicentenario poeta eldense. Olvidaba comentar que nuestro vate es cuasi coetáneo de Chales Dickens, de quien también celebramos su doscientos aniversario, y aunque sea una osadía lo que voy a decir, tanto la obra de El  Seráfico como la de Dickens, están de plena actualidad social, en un próximo post, prometo desarrollar un breve análisis sobre la vigencia de El Seráfico en los momentos actuales de recesión económica, de crisis social y empobrecimiento de Europa ante las devaluaciones internas, vía política de rentas, que está padeciendo el Viejo Continente.
Os animo a adquirir el último numero del semanario Valle de Elda, en el que se hace eco de este 200 aniversario publicando un especial sobre el poeta eldense, en dichas paginas especiales podreís leer, entre otros, un articulo de quien esto escribe.

                                         

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